A mi compañero

Sabés que estás enamorado, cuando no sabés por qué estás enamorado.

Todavía, diez meses después, sigo sintiendo esa emoción de ver tu cara entre la gente. De esperarte en las juntadas, de preguntar por vos medio disimulada (no se vaya a pensar que te buscaba).
Sigo sintiendo ese cosquilleo en la panza cuando sin querer rozábamos. Sigo sintiendo en cada beso ese mareo, ese momentito de perder la razón que te da el primero.
Diez meses después sigo gritando finito cuando me decís algo lindo, sigo sintiendo esos espasmos en el pecho cuando te veo, sigo girando en la cama antes de dormir, recordando todo lo que hablamos durante el día... sigo contando las horas que faltan para verte.
Hasta sonrío veinte metros antes de estar frente a vos, cuando aparecés en la puerta de casa.
Sigo viéndote igual de atractivo, divertido y dulce que aquel noviembre del 2011, cuando sólo éramos "amigos de un amigo" y nos creíamos demasiado diferentes para enamorarnos.

Se nos habrían reído de no ser porque nos encontraron en pleno cruce de miradas, tan transparentes que hasta el más despistado se hubiera dado cuenta de que nos ardía el pecho por abrazarnos tranquilos, sin ocultarnos de nadie.
Diez meses después, todo se siente como la primera vez. Tan emocionante, tan misterioso y fuerte.
Ahora no solo somos un par de tortolillos, sino también muy buenos amigos.

No me lo imagino de otra manera, todo es como quiero que sea.
Yo te quiero, negro... y te quiero de una manera muy linda, desde el corazón, que se ramifica a todo el cuerpo. Te quiero con cada nervio, con cada arritmia, con cada contracción muscular, con cada analogía extraña sobre anatomía y patologías jaja.
No, era joda, pero lo que va enserio soy yo... con vos.

Ojalá el tiempo nos siga acompañando de la misma manera y tenga conmigo a mi amigo, mi compañero, mi chico... porque todo es más divertido cuando estás cerca.
Y si no (por alguna de esas mañas feas del destino), aún así me llevo un montón de recuerdos cargadísimos de energía y un buen puñado de enseñanzas para aplicar en mi vida.
No te prometo nada, porque no manejo el futuro. Pero hoy, en este mismo momento, te estoy queriendo con toda la fuerza y la alegría que me da este "nosotros" tan lindo.

Gracias por todo, pequeño padawan.

No hay comentarios:

Publicar un comentario